Esta construcción del siglo XVII y situada entre La iglesia parroquial y el palacio condal, era originariamente las caballerizas del conde de Aiamans. Posteriormente, con la reforma del Palau, se convirtió en la casa residencia de los criados de los condes y permaneció con esta función hasta la derrota del poder señorial en Lloseta.
Tras ser propiedad de varias familias mallorquinas, actualmente pertenece a la familia lIosetina Ramon coli, que ha realizado una completa rehabilitación -respetando el carácter histórico del edificio y de su entorno- para utilizarlo Io como pequeño hotel de interior.
Los 750 metros cuadrados construidos se distribuyen en tres plantas, además de una antigua patio, caracterizada por su alicatado mediante;: ant piedras redondas de torrente, que le dónauna fisonomía propia.
El edificio se caracteriza por el mantenimiento de gran parte de los elementos de la antigua casa, como I’enrajolat, los lIenyams del techo o las arcadas y los marcos de piedra de las paredes y ventanas. Cabe destacar también la belleza de la piedra viva de la fachada principal y de las paredes interiores y la monumental escalera abierta, con una arcada, en el patio.